MANGLARES SALVAVIDAS

Pulmones alternos de la heroica

La ciudad de Cartagena es muy reconocida por su belleza colonia y su atractivo turístico, lo que pocas personas que viven por fuera desconocen, es que coexiste un hermoso despliegue de bosque marino que tiene una importante función de contribución ambiental y que vuelve fascinante el recorrido por su jungla flotante.
Estos ecosistemas están asociados a humedales naturales, sirven de protección a la riqueza faunística que habita en sus aguas. Tienen la capacidad de amortiguar la sedimentación y de evitar la erosión de la tierra, cumplen una función de filtro para preservar la calidad el agua y además toleran un alto nivel de salinidad y poseen una estructura especial que permite la entrada de oxigeno y salida de dióxido de carbono.
Pero no todo es tan afortunado, se ven afectados por muchas razones como la contaminación de las industrias, construcción de obras civiles sobre sus terrenos, alteración de flujos hídricos y más que todo por la inconsciencia de los habitantes cercanos, que sin temor desechan cualquier elemento contaminante.
Es claro que para el Estado Colombiano y de los ciudadanos es un deber proteger el medio ambiente, aunque no todos cumplan con este mandato, existe una entidad que a lo largo de muchos años se ha dedicado a preservar las reservas naturales y promover la conciencia ambiental. La Corporación Autónoma Regional del Canal del Dique CARDIQUE, es la encargada de que estos ecosistemas se mantengan con el cuidado especial que requieren, pues ellos siembran los manglares y regulan su crecimiento y funcionabilidad.
Al pasar por diversos sitios de Cartagena es muy agradable apreciar el panorama de un bosque flotante que se puede recorrer en canoa, disfrutando del ambiente cálido, respirando aire puro, escuchando el canto de los pájaros, contemplando la diversidad de peces que se pasan por debajo y el encanto de un ecosistema natural que nos recuerda lo bella que es nuestra tierra, con la cual debemos estar aliados y no de rivales.